Días atrás el BCU publicó el informe de cuentas nacionales del periodo julio setiembre de 2018.
De acuerdo al citado informe, en el tercer trimestre del año 2018 la actividad de la economía uruguaya creció 2,1% en términos interanuales. El Producto Bruto Interno (PBI) medido en términos desestacionalizados se mantuvo en los mismos guarismos del periodo inmediato anterior.
Al analizar las cifras interanuales desde la óptica de la producción se destacan las performances positivas de las actividades primarias (6,1%), Industrias Manufactureras (4,6%) y Transporte, almacenamiento y comunicaciones (6,1%). En el caso de las actividades primarias las cifras reflejan el crecimiento de la extracción de ganado vacuno y de la remisión de leche y las buenas cosechas de cultivos de invierno. En lo referente a industrias manufactureras, el guarismo es consecuencia del reinicio de actividades de la refinería de ANCAP. Dejando este hecho de lado, el resto del sector industrial estaría reflejando una caída del 2,4%. Por ultimo el crecimiento del agregado de transporte, almacenamiento y comunicaciones es consecuencia únicamente del componente de comunicaciones. Ello como resultado de crecimiento en las ventas de servicios de transmisión de datos (internet).
La contracara de estos desempeños positivos fue la contracción del rubro comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles (-0,9%). La explicación oficial esta asociada fundamentalmente al menor ingreso de turistas argentinos a lo largo del trimestre por motivos cambiarios. Ademas de ello existen indicadores del sector comercial que hacían pensar en una caída aun mayor que la registrada.
El análisis desde la óptica del gasto es similar al que se viene presentando desde hace varios trimestres. El sostén de la actividad sigue siendo el consumo privado, que creció un 2,5% en la comparación interanual. También se produjo un crecimiento en la llamada formación bruta de capital por incremento de stocks de productos agrícolas pendientes de comercialización. La inversión privada se retrajo nuevamente un 0,4% en el periodo analizado. Al mismo tiempo se dio una caída del 10,4% de las exportaciones (fundamentalmente por reducción de las exportaciones de soja) y un incremento del 3,3% de las importaciones.