Los movimientos en los mercados cambiarios regionales que vienen cobrando fuerza desde los primeros meses del año en curso, cambiaron significativamente el panorama de precios relativos entre nuestro país, Argentina y Brasil.
De acuerdo al índice de tipo de cambio real que prepara el periódico El Observador (ITCR-EO), el deterioro de la competitividad respecto de los principales socios comerciales del Uruguay fue del 2,2% en el mes de junio de 2018 y de acuerdo a datos primarios estaría empeorando un 1,1% adicional en julio. Siguiendo la misma fuente de información, la situación es mucho más compleja cuando la comparación se hace con nuestros vecinos. En el caso de Argentina y Brasil la pérdida de competitividad está acumulando un deterioro del 14,1% en junio de 2018 respecto de los valores del mismo mes del año anterior.
Esta situación cambiaria regional afecta en varios niveles:
En primer lugar, está el efecto directo sobre el sector comercial de las zonas fronterizas. El desplazamiento de consumo de la población de esas zonas hacia el comercio minorista de los países vecinos es inmediato. Ello se refleja en una caída de ventas tanto a nivel comercial como en algunos servicios (por ejemplo, la gastronomía).
Un segundo efecto de este cambio en la estructura de precios relativos es el que se da a nivel de la competitividad de los productos comercializables con Argentina y Brasil. Los productos que Uruguay exporta pierden competitividad y los productos uruguayos que están sujetos a la competencia de importaciones provenientes de nuestros vecinos pasan a tener una situación más ajustada en materia de precios. Los efectos de estos cambios sobre los flujos de comercio exterior son más lentos, pero una vez que se presentan son mucho más difíciles de revertir.
Por último existe un impacto directo sobre los ingresos generados por el sector turístico. En caso de mantenerse la estructura de precios relativos actual, el Uruguay está mucho más «caro» que Argentina y Brasil y eso afecta directamente el ingreso de turistas provenientes de esos países. Sobre todo el ingreso de turistas argentinos que es de lejos el más importante para nuestro país.